lunes, 28 de abril de 2014
¿Para quién trabaja la MUD?
Liberación Nacional y No-Reelección (71)
Para que usted mismo se responda la pregunta le hago una breve introducción al tema
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En 2002 no existía la MUD, porque los partidos acobardados estaban huyendo desde 1.999 cuando entregaron mansamente las instituciones democráticas, incluido el Congreso. La lucha contra la tiranía comunista, que apenas comenzaba, era sostenida por la sociedad civil, que al efecto formó una alianza de clases, así: CTV-Trabajadores (Carlos Ortega), GENTE DEL PETRÓLEO-Clase media profesional (Juan Fernández) y FEDECÁMARAS-Empresarios (Pedro Carmona). Bajo esta dirección la sociedad civil, transformada en alianza cívico-militar, logró la inmensa victoria, nunca más repetida, de obligar a Chávez a renunciar. El error estuvo en que los mantuanos o amos del valle quisieron repetir lo mismo que hicieron en 1.810: tomar el gobierno para sí, olvidando las consecuencias que entonces trajo. El fracaso se hubiera evitado si la alianza de clases se hubiera reflejado en una junta de gobierno tripartita.
Aquel suceso le enseñó a Chávez que la sociedad civil es inmanejable, porque no la puede comprar con cargos y contratos. Entonces procedió a reconocerle el liderazgo de oposición a los partidos. En contrapartida éstos se han sumado a la campaña de desprestigio de la rebelión popular de 2002, sólo comparable, guardando la distancia y la dimensión, con la del 19 de abril. Los partidos la han condenado, calificándolo de un error que no se debe repetir. ¿A quién beneficia la condena de la rebelión cívico-militar como salida en una situación como la que vivimos? A la tiranía comunista, por añadidura títere de Cuba. ¿A quién perjudica esta condena? Al pueblo, porque le amputa una de las manos con la cual golpear y barrer a los opresores.
Decepcionado el pueblo por el fraude en el referéndum revocatorio, anunció mediante las encuestas que se abstendría en las elecciones parlamentarias de 2005. Así lo hizo. Los partidos no aprovecharon esta oportunidad para otra rebelión contra la tiranía. Al contrario, imploraron misericordia. Y, a partir de entonces, iniciaron una campaña de desprestigio contra la abstención como medio de lucha inserta dentro de una estrategia insurreccional. La efectividad de la abstención como antesala de la rebelión cívico-militar había sido probada en diciembre de 1957 contra la anterior dictadura y más recientemente en Perú para derrocar a Fujimori. Aquí no ha funcionado por culpa de los partidos, cuya sargentería sólo saca cuentas de los puestos y negocios que pierde.
¿A quién beneficia la renuncia a la abstención masiva como factor de desestabilización, que sirve de antesala a la rebelión cívico-militar? A la tiranía comunista, por añadidura títere de Cuba. ¿A quién perjudica? Al pueblo, al cual se le cierran todas las salidas distintas a la electoral.
Dejemos para otro día lo sucedido desde 2006 hasta 2012. Situémonos en 2013. La MUD aceptó todas las inconstitucionalidades sumadas desde el 8 de diciembre de 2012, última vez que se vio vivo al ahora difunto. No cuestionó el misterio, aún sin revelar, de su enfermedad y muerte. Llevó a votar en las condiciones más adversas. Denuncia el fraude. Luego retrocede. Da esta excusa: “no convocamos a la calle porque habrá muertos.” Entonces ni rebelión, ni abstención desestabilizadora, ni protestas en la calle. Sólo diálogo, negociación, entreguismo, votar para perder.
A la pregunta: ¿para quién trabaja la MUD?, sólo hay una respuesta: para la tiranía comunista, para mayor vergüenza títere de Cuba. Es el instrumento colaboracionista de la tiranía, encargada de arriar a los electores como borregos al matadero electoral, un callejón sin salida.
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Ya está en las librerías el libro: CHÁVEZ Y LA PERVERSIÓN DEL EJÉRCITO, tesis doctoral de mi hijo, Vladimir Petit Medina, que mereció del jurado el veredicto: “excelente y publicación.” Me ahorran el elogio interesado, de padre orgulloso, el comentario del catedrático Dr. Demetrio Boersner: “un trabajo excepcional para la cabal comprensión de lo que ha sucedido todos estos años.” Y del Dr. Fernando Falcón, Coordinador del Doctorado en Ciencias Políticas-UCV: “Lo que retrata y analiza Petit fue lo que efectivamente pasó…un trabajo histórico en el cual, con herramientas gerenciales, llega a conclusiones verdaderas.”
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"El único tirano que acepto en este mundo es mi propia voz interior." M.Gandhi